martes, 25 de mayo de 2010

Teorías Sobre el Desarrollo Humano FREUD


Sigmund Freud (6 de mayo de 1856, en Příbor, Moravia, Imperio austríaco (actualmente República Checa) - 23 de septiembre de 1939, en Londres, Inglaterra, Reino Unido) originalmente conocido como Sigismund Schlomo Freud, fue un médico y neurólogo austriaco, creador del psicoanálisis y una de las mayores figuras intelectuales del siglo XX.

Su interés científico inicial como investigador se centró en el campo de la neurología, derivando progresivamente sus investigaciones hacia la vertiente psicológica de las afecciones mentales, de la que daría cuenta en su práctica privada.

Freud innovó en dos campos. Desarrolló simultáneamente por un lado, una teoría de la mente y de la conducta humana, y por otro, una técnica terapéutica para ayudar a personas con afecciones psíquicas. Algunos de sus seguidores afirman estar influidos por uno, pero no por otro campo.

Probablemente, la contribución más significativa que Freud ha hecho al pensamiento moderno es la de intentar darle al concepto de lo inconsciente(que tomó de Eduard von Hartmann, Schopenhauer y Nietzsche) un estatus científico (no compartido por varias ramas de la ciencia y la psicología). Sus conceptos de inconsciente, deseo inconsciente y represión fueron revolucionarios; proponen una mente dividida en capas o niveles, dominada en cierta medida por una voluntad primitiva mas allá de la esfera consciente y que se manifiesta en chistes, lapsus, actos fallidos y sueños.

En su obra más conocida, La interpretación de los sueños (1900), Freud explica el argumento para postular el nuevo modelo del inconsciente y desarrolla un método para conseguir el acceso al mismo, tomando elementos de sus experiencias previas. Como parte de su teoría, Freud postula también la existencia de un preconsciente, que describe como la capa entre el consciente y el inconsciente (el término subconsciente es utilizado popularmente, pero ya no forma parte de la terminología psicoanalítica). La represión, por su parte, tiene gran importancia en el conocimiento de lo inconsciente. De acuerdo con Freud, las personas experimentan a menudo pensamientos y sentimientos que son tan dolorosos que no pueden soportarlos. Estos pensamientos y sentimientos (al igual que los recuerdos asociados a ellos) no pueden, según sostuvo, ser expulsados de la mente, pero sí pueden ser expulsados del consciente para formar parte del inconsciente.

Aunque a lo largo de su carrera Freud intentó encontrar patrones de represión entre sus pacientes que derivasen en un modelo general para la mente, observó que sus distintos pacientes reprimían hechos diferentes. Advirtió, además, que el proceso de la represión es en sí mismo un acto no consciente (es decir, no ocurriría a través de la intención de los pensamientos o sentimientos conscientes).

Freud buscó una explicación a la forma de operar de la mente. Propuso una estructura de la misma dividida en tres partes: el Ello, el Yo y el Superyó:

  • El Ello representa las pulsiones o impulsos primigenios y constituye, según Freud, el motor del pensamiento y el comportamiento humano. Contiene nuestros deseos de gratificación más primitivos.
  • El Superyó, la parte que contrarresta al Ello, representa los pensamientos morales y éticos.
  • El Yo permanece entre ambos, alternando nuestras necesidades primitivas y nuestras creencias éticas y morales. Es la instancia en la que se inscribe la consciencia. Un Yo saludable proporciona la habilidad para adaptarse a la realidad e interactuar con el mundo exterior de una manera que sea cómoda para el Ello y el Superyó.

Freud estaba especialmente interesado en la dinámica de estas tres partes de la mente. Argumentó que esa relación está influenciada por factores o energías innatos, que llamópulsiones. Describió dos pulsiones antagónicas:

  • Eros o pulsión de vida, una pulsión sexual tendente a la preservación de la vida.
  • Tánatos o pulsión de muerte. Esta última representa una moción agresiva, aunque a veces se resuelve en una pulsión que nos induce a volver a un estado de calma, Principio de nirvana o no existencia, que basó en sus estudios sobre protozoos (Más allá del principio de placer).
Freud también creía que la libido maduraba en los individuos por medio del cambio de su objeto. Argumentó que la sexualidad infantil es "polimórficamente perversa", en el sentido de que una gran variedad de objetos pueden ser una fuente de placer. Conforme las personas van desarrollándose, van fijándose sobre diferentes objetos específicos en distintas fases:
  • La Fase oral designa un concepto elaborado por Sigmund Freud. Representa la primera fase de la evolución libidinosa; el placer sexual está ligado entonces predominantemente a la excitación de la cavidad bucal y de los labios, que acompaña a la alimentación. La actividad de nutrición proporciona las significaciones electivas mediante las cuales se expresa y se organiza la relación de objeto; así, por ejemplo, la relación de amor con la madre se hallaría marcada por las significaciones: comer, ser comido.
  • La Fase anal o Fase anal-sádica designa un concepto elaborado por Sigmund Freud. Según Freud, la segunda fase de la evolución libidinal, que puede situarse aproximadamente entre dos y cuatro años; se caracteriza por una organización de la libido bajo la primacia de la zona erógena anal; la relación de objeto está impregnada de significaciones ligadas a la función de defecación (expulsión-retención) y al valor simbólico de las heces. En ella se ve afirmarse el sadomasoquismo en relación con el desarrollo del dominio muscular.
La fase anal en psicología es un término utilizado por Sigmund Freud para describir el desarrollo infantil durante el segundo año de vida, en donde el niño siente placer y el conflicto se centra en el área anal. Esta etapa es ejemplificada en el placer del niño de controlar sus intestinos. Esta es la segunda pulsión mencionada por Freud. Según la teoría de Freud, la incapacidad de resolver los conflictos que se presentan durante esta etapa pueden causar una fijación retentivo anal o expulsivo anal.

Cuando la habilidad de controlar el esfínter anal madura (2-3 años de edad), la atención del niño pasa de la zona oral a la anal.
El concepto de fijación ocurre cuando hay un exceso de gratificación en esta etapa, lo que desarrolla una personalidad en extremo desorganizada, o por el contrario, cuando la gratificación no ocurre, dando origen a un individuo sumamente organizado.

  • La Fase fálica (o a veces uretral) es una de las fases pulsionales de la teoría sobre el desarrollo psicosexual de Sigmund Freud. Sobreviene a continuación de la fase anal y tiene lugar en la primera infancia, entre las edades de 3 y 5 años. En esta etapa, la zona erógena predominante son los genitales (clítoris en la mujer y pene en el varón) y las sensaciones placenteras se obtienen sobre todo mediante la actividad de orinar. Según Freud, durante esta fase se superan los conflictos emocionales conocidos como complejo de Edipo. Según la teoría freudiana, en la etapa fálica puede desarrollarse el complejo de castración en las niñas junto a la denominada envidia del pene. Más precisamente, mientras en el niño el complejo de castración marca la salida del complejo de Edipo (ante la amenaza de ser castrado, renuncia a sus deseos incestuosos hacia la madre), en la niña la organización fálica determina suentrada al complejo de Edipo: el descubrimiento de que no posee un pene suscitaría la envidia de este, al tiempo que provocaría sentimientos de rabia y animadversión contra la madre por no haberle dado uno, inclinándose la niña hacia su padre como objeto de amor, quien, por un lado, posee un pene y, por otro, es capaz de entregar un hijo, que en la teoría freudiana funciona como falo, es decir, como equivalente simbólico del pene.
Freud especifica con el termino fase fálica la primera maduración genital que se caracteriza por la dominación imaginaria del atributo fálico, y por el goce masturbatorio; localiza este goce en la mujer en el clítoris, promovido así a la función de falo.

  • El Período de latencia designa un concepto elaborado por Sigmund Freud. «Período comprendido entre la declinación de la sexualidad infantil (quinto o sexto año) y el comienzo de la pubertad, y que representa una etapa de detención en la evolución de la sexualidad. Durante él se observa, desde este punto de vista, una disminución de las actividades sexuales, la desexualización de las relaciones de objeto y de los sentimientos (especialmente el predominio de la ternura sobre los deseos sexuales) y la aparición de sentimientos como el pudor y el asco y de aspiraciones morales y estéticas. Según la teoría psicoanalítica, el período de latencia tiene su origen en la declinación del complejo de Edipo; corresponde a una intensificación de la represión (que provoca una amnesia que abarca los primeros años), una transformación de las catexis de objetos en identificaciones con los padres y un desarrollo de las sublimaciones.
  • La Fase u organización genital designa un concepto elaborado por Sigmund Freud. «Fase del desarrollo psicosexual caracterizada por la organización de las pulsiones parciales bajo la primacía de las zonas genitales; comporta dos tiempos, separados por el período de latencia: la fase fálica (u organización genital infantil) y la organización genital propiamente dicha, que se instaura en la pubertad.
Algunos autores reservan el término «organización genital» para designar este último tiempo, incluyendo la fase fálica en las organizaciones pregenitales.
Según Freud, la fase genital se inicia en la pubertad y perdura el resto de la vida del individuo. Con la aparición de la pubertad, los deseos sexuales se hacen también demasiado intensos como para reprimirlos completamente, por lo que comienzan a manifestarse.
Ahora, el foco de atención se encuentra en la elección de objeto. Si todo ha ido correctamente durante las fases anteriores, esta fase culminará con los encuentros y finalmente con la pareja.
Las infragratificaciones, o las supergratificaciones, y las fijaciones que una persona haya experimentado (o no haya experimentado) durante las fases psicosexuales determinarán la personalidad del adulto. Si, posteriormente durante su vida, la persona presenta problemas de adaptación, un análisis de las experiencias tempranas podría contribuira la solución de esos conflictos.

Para el psicoanalista, en las experiencias ocurridas durante la infancia, se encuentra la base a partir de la cual se forman las neurosis posteriores o la personalidad normal. De hecho, el niño es un "perverso polimorfo", que con la figura metafórica del padre se convierte. "El niño es el padre del hombre".

El modelo psicosexual que desarrolló ha sido criticado desde diferentes frentes. Algunos han atacado la afirmación de Freud sobre la existencia de unasexualidad infantil (e implícitamente la expansión que hizo en la noción de sexualidad). Otros autores, en cambio, consideran que Freud no amplió los conocimientos sobre sexualidad (que tenían antecedentes en la psiquiatría y la filosofía de autores como Schopenhauer); sino que Freud "neurotizó" la sexualidad al relacionarla con conceptos como incesto, perversión y trastornos mentales. Ciencias como la antropología y la sociología argumentan que el patrón de desarrollo propuesto por Freud no es universal ni necesario en el desarrollo de la salud mental, calificándolo de etnocéntrico por omitir determinantes socio-culturales.

Freud esperaba probar que su modelo, basado en observaciones de la clase media austriaca, fuese universalmente válido. Utilizó la mitología griega y la etnografía contemporánea como modelos comparativos. Acudió al Edipo Rey de Sófocles para indicar que el ser humano desea el incesto de forma natural y cómo es reprimido ese deseo. El complejo de Edipo fue descrito como una fase del desarrollo psicosexual y de madurez. También se fijó en los estudios antropológicos sobre totemísmo, argumentando que reflejan una costumbre ritualizada del complejo de Edipo (Tótem y tabú). Incorporó también en su teoría conceptos de la religión católica y judía; así como principios de la sociedad victoriana sobre represión, sexualidad ymoral; y otros de la biología y la hidráulica.

Esperaba que su investigación proporcionara una sólida base científica para su método terapéutico. El objetivo de la terapia freudiana o psicoanálisis es, relacionando conceptos de la mente cartesiana y de la hidráulica, mover (mediante la asociación libre y la interpretación de los sueños) los pensamientos y sentimientos reprimidos (explicados como una forma de energía) hacia el consciente para permitir al sujeto la catarsis que provocaría la cura automática.

Otro elemento importante del psicoanálisis es la relativamente poca intervención del psicoanalista para que el paciente pueda proyectar sus pensamientos y sentimientos en el psicoanalista. A través de este proceso, llamado transferencia, el paciente puede reconstruir y resolver conflictos reprimidos (causantes de su enfermedad), especialmente conflictos de la infancia con sus padres.

Desde el punto de vista de la medicina, la teoría y práctica freudiana han sido sustituidas por los descubrimientos empíricos a lo largo de los años. La psiquiatría y la psicología como ciencias rechazan hoy la mayor parte del trabajo de Freud. Sin embargo, muchas personas continúan aprendiendo y practicando el psicoanálisis freudiano tradicional.